Adjuntamos enlace a la página de elmundo.es con un artículo
publicado hoy.
Una vez más en el artículo se hace referencia al Real Decreto
(235/2013) ya publicado en el BOE.
Las medidas que se indican en el artículo son recomendaciones
dadas por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y Ecologistas en
Acción que detallan las principales
medidas para ahorrar en el hogar, pero solo algunas de ellas son medidas de
mejora que arrojan los programas de certificación que permutan todos los datos
posibles y arrojan unas cantidades de medidas sumamente grandes, de la cuales
el técnico debe optar en su información por aquellas más viables para cada
inmueble.
El resto de medidas que se indican en el artículo son de sentido
común… bombillas de bajo consumo o LED, electrodomésticos eficientes,
termostatos o temporizadores, apagar aparatos eléctricos en lugar de dejarlos
en stand by, reparar fugas o cerrar el grifo cuando no se use, así como emplear
aireadores y calderas de condensación (esta medida ya supone un gasto
importante). De hecho gran parte de la población ya tiene muchos de estos
hábitos como normales.
Temas más serios son la instalación de mecanismos de maniobra
selectiva en ascensores, detectores de presencia en zonas comunes, ya que son
lógicos en casos de comunidades de propietarios o mediante la intermediación de
administradores de fincas, en este caso ya entramos en el campo de la auditoría
energética, que evidentemente no se queda solo en estos aspectos, siendo mucho
más compleja y obteniéndose mayor cantidad de medidas y propuestas de ahorro
así como planes de acción y seguimiento para toda una finca.
Y en cuanto al cambio de ventanas, está claro que una ventana con
rotura de puente térmico, va a ahorrar más energía, en forma de disminución de
la demanda (ahorro de calefacción y refrigeración) que una ventana convencional
sin rotura y en viviendas unifamiliares es una buena opción, también lo es en
viviendas en altura, pero debemos pensar en analizar toda la envolvente térmica
en ambos casos. De poco sirve mejorar el hueco (ventanas) si tenemos fugas por
otros puentes térmicos o deficiencias de aislamiento.
De nuevo entramos en el campo de la auditoría, lógicamente más
fácil de llevar a cabo en unifamiliares que en viviendas en bloques, simplemente
por la complejidad de poner de acuerdo a los propietarios.
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